La historia de Bulle de Vanille comienza en 2018, cuando Hervé y Christine se fueron de viaje a Guadalupe.
Lejos de los viñedos, a Hervé se le ocurre una idea cuando descubre una especia local: la vainilla.

Decide traer algo a Champaña y realizar pruebas en las botellas de champán rosado. Durante el degüelle, etapa en la que se libera la presión y se sustituye la cápsula por el corcho de Lieja, Hervé colocará las vainas de vainilla en las botellas. Cada botella tendrá diferentes configuraciones para que puedas comparar gustos.

Tras un reposo de 5-6 meses, llega el momento de descubrir el preciado néctar. Fue en ese momento, rodeado de amigos íntimos, que nació la Bulle de Vanille después de que la dulzura de las burbujas sorprendiera nuestras papilas gustativas.

Dado que el champán es una receta protegida, era necesario buscar un vino espumoso alternativo, el Crémant de Die. La unión del alcohol y la vainilla les ofrece hoy un vino excepcional, ganador de una medalla de oro en 2023.

La patente fue presentada y hoy es tu turno de probar esta maravilla creada por la pasión y la creatividad de Hervé.